La actual pandemia de COVID-19 ha cambiado por completo la forma en que interactuamos con los productos y servicios, y como resultado está presionando a las grandes empresas a transformarse digitalmente en semanas-mes en lugar de los años establecidos en muchas de sus estrategias digitales. 

Una necesidad urgente de transformación digital

Las circunstancias actuales hacen que el futuro sea aún más incierto para las grandes empresas. Un tema común que estamos viendo ahora es una mayor urgencia para una rápida transformación digital, en respuesta al confinamiento y en preparación de la “nueva normalidad”. Justo antes de que llegara la pandemia, IDC publicó algunas investigaciones interesantes sobre lo “determinadas digitalmente” que están la mayoría de las grandes empresas. Encontraron que la mayoría (63%) están de hecho angustiados digitalmente, es decir, rezagados con su transformación digital, y que solo el 12% de los que están determinados digitalmente (37%) están en un nivel adecuado de transformación continua.

La positividad durante el confinamiento actual puede ser difícil, pero nos da a todos la oportunidad de dar un paso atrás y pensar más estratégicamente en lo que podríamos estar haciendo mejor a medida que avanzamos.

Está ampliamente aceptado que las API y los microservicios son una parte clave de una transformación digital exitosa, ya sea que esté construyendo una capacidad de transformación por encima de sus sistemas de TI existentes o planeando reemplazarlos.

Entonces, ¿cómo es exactamente una estrategia de API para una empresa determinada digitalmente, que es flexible y receptiva para la transformación continua, y adaptable a lo que sea que traiga el futuro y la “nueva normalidad”?

Avanzar en la estrategia de APIs Empresarial

La buena noticia es que la mayoría de las grandes empresas están muy avanzadas  con la primera fase de su madurez de API,

En primer lugar, la estrategia de API  inicial implica un cambio de mentalidad en cuanto a la importancia de las API. A continuación, vemos la implementación de sistemas de gestión de API en tiempo de ejecución.

Una vez que se sienten estas bases, lo más probable es que su empresa esté buscando ampliar tanto el número como la cobertura de las API (especialmente las API internas), así como extender el ciclo de vida de la API más allá de los desarrolladores a un público más amplio (sobre todo los gerentes de productos empresariales) dentro de su ecosistema empresarial. Sin embargo, se expone una brecha en el marco si intentas ampliar de una manera segura y consistente, manteniendo la velocidad.

Las herramientas de diseño/desarrollo de API generalmente se componen de editores de código básicos, donde los desarrolladores producen API y las suben al sistema de gestión de código fuente (SCM): las empresas generalmente tienen que elegir calidad o cantidad. Tratar de cumplir con la escala requerida para el siguiente nivel de madurez con este enfoque de herramientas y procesos, inevitablemente resultará en API inconsistentes que no están bien gobernadas, y con mucha duplicación de funcionalidad y esfuerzo. Esta ineficiencia no solo genera un nuevo nivel de deuda técnica, sino que también ralentiza su capacidad para lanzar nuevas aplicaciones digitales y, de manera vital, ser adaptable y flexible con las que ya tiene. También requiere un enorme grupo de trabajo para desarrolladores, lo que, en un momento en el que la necesidad de trabajo a distancia significa que muchas políticas de seguridad corporativas han restringido el número de contratistas de desarrolladores (ya que no se les permite acceder a los sistemas de forma remota), crea un problema importante.

Otro requisito clave para la madurez de la estrategia de API es poder escalar el ciclo de vida de la API más allá de los desarrolladores. Para ello, los SCM no son adecuados para ser el sistema de registro: los detalles de la API se mantienen profundamente en el código específico de la implementación y, por lo tanto, no se pueden descubrir más allá de la audiencia más técnica. Algunas empresas consideran que los portales de desarrolladores son la respuesta, pero estos han sido diseñados para exponer solo unas pocas API orientadas al público y no se escalan fácilmente al número de API internas necesarias para la empresa determinada digitalmente.

Las empresas necesitan una forma de cumplir estos requisitos para poder madurar rápidamente sus esfuerzos de API. Aquí es donde entra en juego la estrategia API evolucionada

La estrategia de API evolucionada aprovecha la abstracción de API (y otros tipos de servicios) para permitir:

• Escalado rápido del desarrollo de API:
  • en todos los números y tipos de API (y Servicios), desde 10-100 API públicas hasta miles de bloques de construcción listos para paquetes (capacidades empresariales y de TI reutilizables representadas como API y servicios)
  • ampliando la audiencia de las API, en toda la empresa e incluyendo a los gerentes de producto
• Organización y normalización de las API: para proporcionar reconfigurabilidad para la reutilización y la gestión del ciclo de vida
• Un multiplicador de fuerza para el talento de los desarrolladores difícil de encontrar: habilitación para los desarrolladores a través de la gobernanza incorporada y el cumplimiento de los estándares de seguridad